En las
fiestas públicas o privadas un elemento imprescindible eran las
coronas y guirnaldas de flores y hojas tanto naturales como
artificiales. Había tal variedad, según el diseño, la materia y la
función, que fueron objeto de estudio en libros dedicados a ellas
(Plinio, Historia Natural XXI) y generaron el desarrollo de
industrias específicas como la de los tejedores y vendedores de
coronas, los coronarii, y la de los jardineros que las
cultivaban para ese fin.
Podían ser pactilis o plectilis, con flores y hojas entrelazas o sutilis, cosidas. De las
coronae sutiles, con las flores cosidas entre sí, las más
apreciadas eran las coronas de rosas, especialmente las llamadas
mero folio, solo de pétalos. Para responder a la demanda de
rosas los jardineros hacían cultivos especiales en invernaderos de
manera que incluso fuera de temporada se podían encontrar rosas o
bien se importaban de Egipto
Como
presente desconocido, César, la tierra del Nilo, deseando agradarte,
te había enviado rosas de invierno. Marcial, VI, 80
Además nos dice Plinio en Naturalis Historia XXI que imitaban las flores con finas láminas de hueso teñidas de colores o
bien con pequeños trozos de seda, por lo que en cualquier estación del año podían adornar sus cabezas o viviendas con hermosas coronas.
Vamos
a centrarnos en las que se usaban en celebraciones
familiares, es decir, con motivo de los nacimientos y matrimonios,
así como en los banquetes.
CORONA
NATALITIA
Para
anunciar a los demás el nacimiento de un nuevo miembro de la familia
se colocaba en la puerta de la casa, una corona natalitia.
Juvenal en Sátiras,
...foribus
suspende coronas:85
iam pater es,...
iam pater es,...
Cuelga
guirnaldas de tus puertas. Ya eres padre...
Siguiendo
a Thomas Bartholin De puerperio veterum, cum notis eruditis
Casparo filii, en Roma se elaboraban estas coronas de nacimiento con laurel, hiedra, apio y
otras hierbas aromáticas. Además hay que destacar que en Atenas
eran diferentes las coronas de niños y las de niñas, ya que según
Hesiquio de Alejandría, en su Diccionario sub voce <στέφανον
ἐκφέρειν> las de chicos eran de olivo y las de las niñas
de lana
ἔθος
ἦν, ὁπότε παιδίον ἄῤῥεν γένοιτο παρὰ
Ἀττικοῖς, στέφανον ἐλαίας τιθέναι πρὸ
τῶν θυρῶν· ἐπὶ δὲ τῶν θηλειῶν ἔρια
διὰ τὴν ταλασίαν
Por
eso la casa donde había nacido el niño se llamaba coronada:
Puerperae domus coronata, dicta est.
Esta
costumbre pervive en la actualidad en Italia la corona se llama fiocco de nascita en azul para los niños y en rosa para las
niñas, en EEUU con el nombre de baby door badge.
Coronas de dos gemelos, niño y niña, en su casa de Venecia. Julio 2012 |
CORONA NUPTIALIS
En
Roma, según Festo s. v. corolla, la esposa debía llevar una
corona de flores y hierbas que ella había recogido personalmente
pero como esta corona se sitúa bajo el velo (sub amiculo), no podemos verla en las imágenes que nos han llegado del matrimonio romano.
En
efecto, en las representaciones de la dextrarum
iunctio en presencia de la pronuba,
se ve la
mujer velada sin corona aparente y el marido no lleva nada en la
cabeza.
También la puerta de la casa, las paredes y el lecho nupcial eran decorados con guirnaldas y flores, (Juvenal, Satirae VI)
ensarta una corona en las jambas y derrama por los umbrales espesa yedra
Para
griegos y romanos la corona nupcial era un símbolo religioso y prueba
de ello es que los primeros cristianos pensaban que no debían
llevarlas en las bodas para no volver a cultos paganos Tertuliano, De corona militis, 13
CORONA CONVIVALIS
Por supuesto las coronas de flores abundaban en los banquetes griegos y romanos y no solo entre los invitados, sino también en los esclavos e incluso en recipientes, especialmente aquellos en los que se mezclaba el vino y el agua. Así Virgilio en Georgias II, 358 dice
los compañeros ponen la corona a la cratera...
Una misma persona podía llevar hasta tres coronas a la vez, pero lo habitual eran dos, en la cabeza y en el cuello, para que los aromas llegaran más rápidamente. Como ejemplo de excesos Cicerón nos presenta a Verres en Verrinas II, 5, 11 con una corona en la cabeza, otra en el cuello y además se acercaba a la nariz una redecilla de lino llena de rosas.
Esta corona tipo collar se llamaba corona longa. La que se llevaba sobre la cabeza tenía la finalidad de evitar la embriaguez gracias a el efecto refrescante de los perfumes, (de rosas, violetas o hiedra) o bien, conseguir un dulce sueño para aquellos invitados que habían bebido demasiado (de azafrán o de flor de henna).
Escancia, Calisto, dos dobles medidas de Falerno, tú Alcimo, echa encima las nieves propias del verano; que mi cabello empapado con excesivo amomo se sature y mis sienes se fatiguen bajo el peso de entrelazadas rosas. El Mausoleo tan cercano nos ordena disfrutar de la vida, al enseñarnos que los dioses mismos pueden perecer. Marcial, V 64
Escancia, Calisto, dos dobles medidas de Falerno, tú Alcimo, echa encima las nieves propias del verano; que mi cabello empapado con excesivo amomo se sature y mis sienes se fatiguen bajo el peso de entrelazadas rosas. El Mausoleo tan cercano nos ordena disfrutar de la vida, al enseñarnos que los dioses mismos pueden perecer. Marcial, V 64
Como siempre es un placer leerle y m i acervo cultural lo agradece.
ResponEliminaQue pase un buen día
Gracias Apicius. Son muchos los tipos de coronas de flores en las fiestas familiares pero he preferido empezar por las de alegría...iremos viendo el resto poco a poco.
ResponEliminaSaludos
Una corona convivals tendremos que hacernos para la celebración del 25 aniversario del fin de carrera!
ResponEliminaBesos!
Sí, estaría genial!Me encanta la idea! a ver si en la Jornada de Sagunto concretamos algo más. Besos
ResponElimina